«Nunca olvidaremos el zigzag de la prórroga en Lisboa» - Xabi Alonso, sobre di Maria.
Há um ano era dado como descartável e, para mim, tornou-se o jogador mais influente e o que ergueu o Real Madrid quer em Espanha, quer na Europa. Para mim, já o disse ao fechar a época, o jogador do ano na Europa foi Angel di Maria (corrigi o título), em rija disputa com Gareth Bale. O argentino jogou como nunca, talvez tenha atingido o seu pico, porventura inalcançável, soube defender com afinco e era uma faca afiada no contra-ataque magistral que Ancelotti melhorou em relação a Mourinho. Di Maria enchia o campo e saía como um toureiro em casa jogo, em ombros e sob aplausos. Fiquei impressionado, ao longo da época, de resto confirmado na final da Taça do Rei com o Barça (golo inicial), depois na final da Champions em Lisboa, já quando Ronaldo não contava para o totobola e os êxitos chegaram sem o português valer alguma coisa nisso. Quando o Madrid estava em baixo era di Maria quem o levantava, com sprints vigorosos e golos oportunos, nunca em bicos de pés e sempre nos píncaros dos momentos geniais dos jogos. Depois apareceu Bale, com slaloms mais directos. E à custa de ambos viveu Ronaldo, com uma catrefada de golos onde era basicamente só necessário encostar.
Quando troca o Real Madrid pelo Manchester United, depois de um Mundial igualmente fabuloso em que repartiu bem com Messi, e tanta falta fez depois de lesionado, a responsabilidade de levar longe a Argentina no Brasil, di Maria merecia muito mais do que 70 ou 80ME pela sua transferência, porque é claro que o Real Madrid o renegou, parece que tinha o destino traçado com as ocasionais injustiças do futebol. Sem se saber se o futuro tratará de o confirmar ou esquecer, se o MU melhorará com ele e o RM aguentará sem ele.
Como sou do Barça, alegro-me ver partir um adversário perigoso que fez a diferença na época passada. Mas deixar de vê-lo na Europa (MU ausente) é um crime de lesa-futebol. Gostava que o grunho do carvalho o resgatasse como fez ao Nani... Isso custará pior do que o asilo, ainda que dourado, em Inglaterra: não ajudará a incluí-lo no trio final do FIFA Player of the Year. Há transferências milionárias que ficam ensombradas para sempre.
Em tempo: só agora li o editorial de um dirctor sábio, correcto e escorreito, Alfredo Relaño do Ás. Diz:
Compareció Ancelotti ante la prensa para decir que se va Di María y Khedira se queda. Natural. Di María puede ser transformado en un cheque valioso, Khedira no. Khedira es un buen jugador, fogonero del medio campo, pero Di María es algo más, porque va y viene y además rompe. El Madrid ahora le culpará de que se va porque quiere. Pero quiere irse porque en su puesto ficharon a Bale y cuando se adaptó a otra zona del campo, con esfuerzo y éxito similares, le ficharon a James. Y le ofrecieron renovar pagándole como el número once de la plantilla y él piensa que era más que eso.
Di María es un buen jugador y además tenía para este Madrid un valor estratégico sobre el que no hay que insistir. Su cadáver no hay que cargarlo sobre la espalda de James Rodríguez, que además podría con ello, a poca suerte que tenga. Es un jugador extraordinario. Si Di María, estrella de la final de la Décima, se va, es porque este Madrid está concebido desde las luces de neón, no desde una lógica futbolística. Es un Madrid de programación alocada, al que le sobra dinero para juntar a Cristiano, Bale y mejorar el sueldo a Benzema. Eso sí: no hay dinero para retener a Di María, que no vende camisetas.
El curso pasado las encuestas daban que Mourinho era ‘antiespañol’, como consecuencia de lo cual el Madrid compró a Illarramendi e Isco por casi 70 millones. Ahora que España ha dado el cante en el Mundial, lo español no viste tanto, así que en sus lugares vienen Kroos y James, figuras en Brasil. Pero como el dinero no es infinito hay que vender a Di María. Y Ancelotti que se apañe. Él levanta la ceja, dice esto y lo contrario, sube los hombros y si le gana el Atleti qué se le va a hacer. Ahora viene el Córdoba. Le faltará Di María, pero allá se las apañe. Tiene buenos jugadores y ya salió del paso el curso pasado.
Em tempo: só agora li o editorial de um dirctor sábio, correcto e escorreito, Alfredo Relaño do Ás. Diz:
Compareció Ancelotti ante la prensa para decir que se va Di María y Khedira se queda. Natural. Di María puede ser transformado en un cheque valioso, Khedira no. Khedira es un buen jugador, fogonero del medio campo, pero Di María es algo más, porque va y viene y además rompe. El Madrid ahora le culpará de que se va porque quiere. Pero quiere irse porque en su puesto ficharon a Bale y cuando se adaptó a otra zona del campo, con esfuerzo y éxito similares, le ficharon a James. Y le ofrecieron renovar pagándole como el número once de la plantilla y él piensa que era más que eso.
Di María es un buen jugador y además tenía para este Madrid un valor estratégico sobre el que no hay que insistir. Su cadáver no hay que cargarlo sobre la espalda de James Rodríguez, que además podría con ello, a poca suerte que tenga. Es un jugador extraordinario. Si Di María, estrella de la final de la Décima, se va, es porque este Madrid está concebido desde las luces de neón, no desde una lógica futbolística. Es un Madrid de programación alocada, al que le sobra dinero para juntar a Cristiano, Bale y mejorar el sueldo a Benzema. Eso sí: no hay dinero para retener a Di María, que no vende camisetas.
El curso pasado las encuestas daban que Mourinho era ‘antiespañol’, como consecuencia de lo cual el Madrid compró a Illarramendi e Isco por casi 70 millones. Ahora que España ha dado el cante en el Mundial, lo español no viste tanto, así que en sus lugares vienen Kroos y James, figuras en Brasil. Pero como el dinero no es infinito hay que vender a Di María. Y Ancelotti que se apañe. Él levanta la ceja, dice esto y lo contrario, sube los hombros y si le gana el Atleti qué se le va a hacer. Ahora viene el Córdoba. Le faltará Di María, pero allá se las apañe. Tiene buenos jugadores y ya salió del paso el curso pasado.
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